Seminario reúne a más de 400 pequeños productores de Berries en La Araucanía
La actividad permitió por primera vez reunir a pequeños productores regionales, Indap y Chilealimentos A.G en una jornada que releva el trabajo del mundo campesino.
Más de 450 pequeños productores de Berries junto a profesionales del agro, y representantes de empresas del rubro se reunieron en las XXVIII Jornadas de Extensión Agrícola, Berries en el Sur de Chile y su primer seminario “Desafíos y proyecciones en el rubro de berries a partir de la agricultura familiar campesina de La Araucanía”, organizado por la Escuela de Agronomía de la UC Temuco en conjunto con Chilealimentos, Indap y el Comité Técnico de Berries de La Araucanía.
En la ocasión, el Dr. Celso Navarro, decano de la Facultad de Recursos Naturales de nuestra casa de estudios comentó que “esta jornada de extensión agrícola ya es un evento que forma parte de la historia de la universidad y en esta ocasión es el primer seminario de berries, una integración del mundo público – privado y científico para poder sentarnos y discutir de un área tan relevante como son los berries en La Araucanía, evidenciando así el compromiso público y regional de la UC Temuco”, expresó.
Por su parte, el director de Chilealimentos, Antonio Domínguez, entregó información relevante para todos los pequeños productores, con el fin de mostrar el escenario global que impacta directamente a la producción y comercialización de los productos. En sus palabras, expresó que “la agroindustria necesita de productores y viceversa y en este sentido nuestro rol es entregar información, para que puedan tomar buenas decisiones y trabajar en conjunto. Nosotros estamos felices que en La Araucanía esté aumentando la producción de berries, creemos también que en parte es consecuencia del clima ya que éste se ha ido moviendo hacia el sur, entonces ahora La Araucanía está viviendo lo que años atrás experimentaba la sexta región”, finalizó Domínguez.
El presidente del Comité técnico de Berries de La Araucanía, Francisco Cheuque comentó en la oportunidad que existe una invisibilización estadística del nivel de producción anual que realizan los pequeños productores. “Hoy acá hay más de 400 productores y no aparecen en ninguna estadística porque no se contemplan a quienes tienen menos de media hectárea. Durante el año 2016 se produjo cerca de 700 mil kilos de berries sólo en Malleco y Loncoche. Hemos estado trabajando y esperando cuadruplicar la cifra para el 2019 porque además sumaremos Cautín.”
Una forma de mejorar las condiciones en el desarrollo de la agricultura familiar campesina, nos indicó Cheuque, es aunar esfuerzos. “Hoy cada productor entrega su cosecha a la industria de manera individual y es lo que queremos modificar, pretendemos unirnos porque eso permite una mejor negociación. Creo que es la fórmula para la región”, finalizó.
AGRICULTURA FAMILIAR CAMPESINA
La Dra. Gina Leonelli, académica de la escuela de agronomía se ha destacado por su trabajo con familias campesinas de la región y hoy estuvo a cargo de la ponencia “Desafíos de la Universidad en la vinculación con la agricultura familiar campesina e indígena. La Formación de profesionales íntegros para el futuro agro regional”. Leonelli consideró que estas instancias permiten conocer las necesidades de los pequeños productores, sobre todo la agricultura familiar campesina, para conectar el quehacer de la docencia con la formación de los estudiantes de la UC Temuco. “Las principales dificultades que se presentan en el desarrollo de una agricultura es trabajar con los insumos de las propias familias. Pienso que cuando miramos la agricultura familiar, llevar un agroquímico, un fertilizante, no está mal pero primero tenemos que ocuparnos de lo que ellos tienen y de lo que ellos saben hacer y trabajar desde ahí, desde su experiencia, desde sus prácticas de producción”, comentó.
“Estas XXVIII jornadas de extensión agrícola que desarrolla la escuela de agronomía se ha convertido en un espacio importante para aprender juntos, para escuchar necesidades y ver de qué manera nosotros a través del currículum podemos recoger esas necesidades y hacernos cargo. Es también una oportunidad para los jóvenes estudiantes de la escuela de agronomía para que se puedan acercar al interés y pasión que se necesita por hacer el trabajo bien y con cariño. Uno de los desafíos que tenemos como Universidad y como escuela de Agronomía es efectivamente poder trabajar con las familias desde sus saberes, insumos y materias orgánicas, con las prácticas agroecológicas que ellos conocen y por sobre todo con sus semillas”, concluyó la Doctora Gina Leonelli.
Dirección de Comunicación y Marketing
Vicerrectoría de Extensión y Relaciones Internacionales
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